TABERNA BLANCO MARTÍN
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- Creado en Lunes, 06 Febrero 2017 10:04
- Escrito por Joaquín Gómez
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TABERNA BLANCO MARTÍN
Parece que José Blanco ha querido hacer un juego de palabras invirtiendo el orden de los apellidos que dan nombre a su nuevo bar, pero únicamente ha aplicado la lógica al bautizar a este recién estrenado establecimiento como Blanco Martín, apellido que llevan sus hijos. Cuando abrió hace ocho años el Martín Blanco de la avenida San Francisco Javier que todos conocemos optó por cambiar el orden porque le gustaba más como sonaba.
Sea como fuere, ha extrapolado su concepto gastronómico a esta nueva apuesta que se ubica a tan solo unos metros del tradicional bar que se ha ganado fama en Sevilla.
Y donde hay una novedad gastronómica allí están los chicos del Majao, que en esta ocasión acuden en un nutrido número, concretamente 15+1.
Con el tinto Carramimbre, unas copitas de Tío Pepe y unas cervecitas empezamos nuestra tercera aventura fuera de nuestras fronteras.En esta ocasión se ha elegido esta taberna que es de corte más clásico que los dos locales de las ocasiones anteriores.
Para comenzar nos decantamos por unas croquetas de setas y jamón que es uno de los estandartes de Martín Blanco o Blanco Martín. Tanto monta,monta tanto.Las croquetas ricas y originales.
Continuamos con otra de las especialidades de la casa que son las setas en caldereta y nuestro experto en la sociedad comenta que no estamos en temporada y que probablemente sean congeladas. A pesar de ello se dejaron comer bastante bien.
Una vez terminado el circuito setero de Llerena nos pasamos a la Extremadura profunda con la probadilla de matanza de salchichón con huevos fritos. Un plato contundente pero en tierra extremeña gusta mucho el tema de pasar a cuchillo al cochino a la manera Al-Quaeda.
Seguimos con el cerdo aunque en esta ocasión consistirá en cochinillo frito porque a nosotros del guarro nos gustan hasta los andares.
Cambiamos de tercio y nos pasamos al pescado y probamos el famoso bacalao dorado con el que damos por terminada la parte salada de la cena.
Como colofón un surtido variado de postre junto al chupito que como es tradición ha de invitar la casa.
Y luego una copita y para casa. Bueno, no todos...