UN QUIJOTE CON LA (MILHOJA DE PEZ) ESPADA Y UN GALLEGO DE ALLARIZ CON PALMERITAS ASALMONADAS

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UN QUIJOTE CON LA (MILHOJA DE PEZ) ESPADA Y UN GALLEGO DE ALLARIZ CON PALMERITAS         ASALMONADAS.
 
 
 
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Quijote soy, y mi profesión, la andante boticaría. Son mis leyes el desfacer entuertos, prodigar el bien y evitar el mal. Huyo de la vida regalada, de la ambición y la hipocresía, y busco para mi propia gloria gastronómica la senda más angosta y difícil. ¿Es eso de tonto y mentecato?
 
Quijote y Gallego. Gallego y Quijote.Compinches y camaradas, grandes amigotes.Dicen las malas lenguas que en su juventud fueron autores de infantiles gamberradas, participantes en alguna que otra estudi antil algarada y que les gusta todo lo que se mueva ya sean solteras como casadas, esmirriadas, despechadas, Dulcineas del Toboso, escotadas o desdentadas,  gordas y delgadas, Aldonzas Lorenzo, e incluso hasta las preñadas.Estos tíos son muy machotes.
 
Pero no sólo comparten amistad, la farmacia es su oficina y algunos jueves también turno de cocina. Arahal y Allariz. Ingenioso hidalgo y escudero traen como pinches a Bacardí (de ventero) y a Chispas (de posadero). Y velan armas en los fogones porque tienen la intención de ser nombrados esta noche caballeros cocineros.
 
 
                       eq
 
 
                                         - Paréceme  Gallego Sancho que tienes mucho miedo.
                                         - Sí tengo, más ¿en qué lo echa de ver vuesa merced ahora más que nunca?
                                         - En qué ahora más que nunca hueles y no a ámbar precisamente.
                                         - No se preocupe ingenioso hidalgo que saldremos de esta como sea.
 
 
 
                        trabajando
 
 
Mire Vuesa Merced que no son molinos gigantes, déjese de tonterías y ponga a estos señores (11+4) unos buenos entrantes. Y allí que va el Quijote olvidando las pendencias.Os voy a ofrecer un plato que es ahora tendencia, se trata de canónigos y guacamole en una ensalada, alioli y un poquito de carne mechada. ¡Vive Dios Quijote que eres más grande que un buen cipote!
 
 
                                      ensalada
 
 
La pluma es la lengua del alma y el que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho, por eso hagámonos de la Santísima cofradía de los tertulianos de Doña Superflua, querido Gallego, y nos ligaremos uruguayas, conoceremos a la hermana de Katia, a mujeres del color de la leche y hasta viajaremos en un tren subterráneo. Soñemos hermano mientras me preparas esas palmeritas de salmón y nueces que, con ellas en el estómago y un poquito de lectura, seguro que mi mente florece.
 
 
                                                            rollito
 
 
No me prometas más el gobierno de la ínsula de Barataria, Quijote. ¿Acaso piensas que soy carajote? Prefiero que me prometas un buen plato de milhojas de pez espada con espinacas y pimientos del piquillo confitados porque eso levanta el ánimo de cualquier afortunado y hambriento machote.
 
 
                                    principal
 
 
A él (Gallego) le vino en voluntad y deseo de hacer lo que otro no pudiera hacer por él. Al bien hacer jamás le falta premio y bien que hizo unas natillas de fruta con naranja, piña y sus trocitos de fresa y papaya. Siempre triunfa este canalla...
 
 
            postre                       postre2
 
 
 
Sé templado en el beber considerando que el vino demasiado no guarda secreto ni cumple palabra, Odres y pellejos de Jaros crianza, ese mágico bálsamo de Fierabrás que cura todas las heridas del alma porque bebo cuando tengo gana, y cuando no la tengo y cuando me lo dan, por no parecer o melindroso o malcriado.
 
Dio luego don Quijote orden de buscar dineros y ajustando una cosa y calibrandro otras y malbaratándolas todas llegó a una razonable cantidad. Sean quince ducados, reales o maravedíes los que se paguen por lo servido o si gustáis mejor dadme mil quinientos céntimos. Así sea caballero andante que un buen rato hemos echado con esta horda de tunantes.
 
Amistad y bonhomía porque de las miserias suele ser un alivio la compañía. Quijote y Gallego seguid cabalgando juntos en vuestro rucio y Rocinante porque la buena y verdadera amistad no puede ser sospechosa de nada y amistades que son ciertas nadie las puede turbar...
 
 
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