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Creado en Lunes, 01 Octubre 2018 11:44
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Escrito por Joaquín Gómez
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BARES, QUÉ LUGARES, TAN GRATOS PARA CONVERSAR
Pues no, vaya, vaya, que aquí no hay playa y nos tenemos que distraer con algo, así que cuando llega el jueves, catorce más dos individuos se preparan para ir al sitio de su recreo y se engalanan frente al espejo mientras tararean:
"Hoy para mí es un día especial,
hoy saldré por la noche,
podré vivir, lo que el mundo nos da,
cuando el sol ya se esconde"
Los cocineros se preguntan "Qué pasará, qué misterio habrá? pensando que puede ser su gran noche. Por eso el Barbas y el Benemérita le cantan a sus pinches Wally y Money:
"Quiero tener tu presencia,( desde las ocho)
quiero que estés a mi lado ( currando como un cabrón)
no quiero hablar de la lucha (en los fogones) si no estamos preparados...
El Barbas que está loco por incordiar dice: "Hola mamoncetes, que hacéis por aquí, ¿buscáis algo de cenar?" Y al grito "A por ellos que son pocos y cobardes" empieza a servir los entrantes comenzando por un ajoblanco de pera.
Como le duele la cara de ser tan guapo y lo está haciendo muy bien, muy bien, muy bien nos pone de segundo entrante una ensalada tibia de gulas y setas, Lleva unos tomatitos cherry que parecen perlas ensangrentadas... Este tío es más joven que nosotros así que lo más probable es que baile sobre nuestras tumbas.
Cruz de navajas en la mesa pero no por una mujer, sino por trincar una tosta de aguacate con bacalao marinado y pipas de calabaza,una receta que el Barbas ha copiado de una amiga. A ver si entre recetitas le va a decir: "Dime que me quieres, dime que me amas". Una vez finalizada su actuación promete estar agradecido por los aplausos y elogios recibidos.
Antonio Benemérita tiene claro que a nadie le importa lo que haga, ni lo que diga porque él es así y así seguirá, Nunca cambiará aunque se haya pelado las melenas y recortado un poco la barba. Son sus maneras de vivir. Hoy no nos trae de principal ni cien gaviotas ni cuatro rosas, Tampoco pollo porque en el Majao ya sabemos que lo que hay pa los pollos es dinamita. Con estas premisas se decanta por caballa encebollada con puré de gurumelos al cava. El puré era puro sabor de amor a la cocina y la caballa espuma del mar.
Sufrimos como mamones para tomarnos el bizcocho de calabaza que había de postre porque el que más y el que menos estaba ya hasta la colcha de comer. Tanto escuchar lo de no controles, no controles, tus sentidos...
Como el agua como diría Camarón nos bebimos la Cruzcampo, la Estrella Galicia, el Tío Pepe y el tinto Cair Cuvée. Y claro, alguno no paraba de preguntar: ¿Y tú de quién eres?,otro decía que no se llamaba Javier y en la barra se apoyaba uno que presumía de tener veneno en la piel, En fin, el alcohol que es muy malo.
Cuando salimos de casa siempre nos despedimos con un adiós papá,adiós papá, consíguenos un poco de dinero más, más dinero, para poder pagar los quince euros que nos cuesta la cena y que nos quede algo para las copas porque corren malos tiempos para la lírica. A esas horas no mires a los ojos de la gente porque te puedes llevar una sorpresa y alguno puede estar a estas alturas bolillón, bolillón, bolillón. Y seguramente tendrá que expulsar esa agüita amarilla, cálida y tibia...
Ya nos hubiese gustado, al salir del local, habernos ido a nuestro Cadillac segunda mano con la última rubia que vino a probar el asiento de atrás pero lamentablemente nos tendremos que conformar con irnos a casa que está al otro lado de la carretera. Y por las noches haremos lo de siempre porque nos gusta y porque nos divierte...
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