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EL SILENCIO DE LOS CORDEROS
Hoy se reunen en El Majao el psiquiatra Hannibal Stoner Lecter y el asesino apodado Buffalo Matabichos Bill. Quiere decir esto que alguién va a morir esta noche. Vienen acompañados de los ayudantes en sus crímenes el enfermero Barney Furtivo Mathews y el desequilibrado James Monarca Gumb que recogerán los restos del cadáver y dejarán limpia la escena del crimen.
Al pueblo le gusta que corra la sangre pero sobre todo ver la ejecución. Hoy no va a caer la guillotina como en la Revolución Francesa ya que el convicto ha sido condenado a morir en la olla grande. Pero a pesar de ello han venido 17+ 3 canibales dispuestos a comerse el 
cadáver una vez ejecutado.
"Quid pro quo" significa "algo por algo" y eso es lo que ha hecho Buffalo Matabichos Bill. A cambio del plato principal y el postre ha elaborado unos entremeses consistentes en empanadillas redondas de sobrasada con queso de cabra por un lado y por otro,de calabacines con queso enmental. Para completar los entrantes una ensalada de brotes tiernos con rúcula y gambas al ajillo.A pesar de que son canibales se comen las hierbas como si fueran tiernos corderillos.
La imaginación es lo único que nos diferencia de todos esos estúpidos que no saben qué poner en una mesa y a Stoner Lecter si hay algo que no le falta es imaginación. Por eso ha condenado al cordero a morir al curry bañado con leche de coco y acompañado de arroz basmati. ¡Un auténtico criminal no tiene piedad!
Cuando un canibal se pone hasta las trancas luego se toma un postre ligerito asi que se sirve un queso ricota con sirope de arce y nueces.
Al final y por muy canibal que se sea hay que pagar la cena y ésta cuesta 15 euros.
A Hannibal Stoner Lecter una vez un empadronador intentó ponerlo a prueba y se comió su higado con frijoles y un buen vino de Ribera del Duero como el "Viejo Mundo" que hemos tomado hoy.
Codiciamos lo que vemos cada día y ser canibal no implica que no nos guste un gin-tonic,un whisky o un buen vodka así que nos tomamos alguno antes de irnos a buscar nuevas víctimas.
Al final de la cena nuestro querido Stoner Lecter se despide diciendo " Me gustaría charlar algo más con vosotros,pero voy a cenar a un viejo amigo"
¿HAN DEJADO DE LLORAR YA LOS CORDEROS?
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El Majao - Asociación cultural-gastronómica |
